Y sigue creciendo...

El tiempo corre y yo solo lo veo pasar. Me conquisto con su primer llanto, avisando que llegaba a compartir con nosotros el resto de su existencia.
Primero quería que se levantara, que caminara, corriera y hablara, ahora no puedo pararlo y mucho menos callarlo, aprende tan rápido, y de todo, ahora ya va a la escuela y amplia sus horizontes en cada clase, siempre tiene algo nuevo que compartir, pasa el tiempo tan de prisa, que la ultima vez que quise regañarlo por no portarse como un niño grande, termine reprendiéndome a mi mismo, y diciendo debe comportarse como niño, lo abrace y le dije que siguiera jugando pero que tuviera cuidado, y me puse a pensar, que en abrir y cerrar de ojos deje de verlo en su cuna, son su gorro y guantes, para notarlo ataviado con el uniforme del colegio y esperándome para enseñarme la estrella que la maestra pego en su frente como una recompensa a su hambre de aprender.
Lo abrazo y retengo en mi ser cada instante que compartimos pues, se que mañana será tal vez mas alto o mas fuerte que yo. Y yo tendré guardado cada momento.
Su mundo ya esta girando… yo solo le di un empujon.