Yo ver llover!

Escuche otra vez una frase ayer, “que bueno es ver llover y no mojarse” en el momento, pensé, es cierto, pues estábamos terminando el servicio en la iglesia y llovía a cantaros Pero las frías gotas de la tormenta no nos alcanzaban a mojar, estábamos afuera bajo techo y disfrutando el aire fresco, solo viendo llover, contemplando como pasaban los coches y alguno que otro incauto que fue capturado por la tormenta y que con la firme convicción de llegar a su destino, corría tratando de no remojar sus ya empapados vestidos. Paréntesis, por que será que la gente que ya esta empapada por la lluvia sigue corriendo?, piensan a caso que se van a liberar del remojo, y por el hecho de correr van a llegar secos, ósea ya estas empapado!, en fin, cierro paréntesis y continuo.
A veces pasamos la vida como espectadores, solo así, viendo llover y sin mojarnos, y encuentro dos aplicaciones personales, una es el dejar de disfrutar las cosas buenas de la vida porque alguna ves nos toco perder, y decidimos simplemente observar los juegos desde afuera y no volver a participar de ellos. Simplemente por miedo.
También situados en nuestra zona de confort a veces hay gente afuera mojándose en una tormenta de problemas, tal vez sintiéndose arrastrados por la corriente y nosotros guarecidos, cómodos y seguros, la mayoría de las veces con las manos libres o una soga para poderla lanzar y ayudar, no lo hacemos pues podríamos entonces mojarnos. Como pues ayudas a alguien si esperas a que la tormenta pase? Es necesario salir y actuar cuando se necesita y no quedarnos ahí, parados, solo viendo llover.